Comenzaban Figuraí los primeros programas de prosperidad para introducir estas características en variedades de parada contenido de THC y agradable esencia.
Autoflower, las semillas de cannabis aún poseen una decano flexibilidad a la hora de cultivarlas luego que su ciclo natural significa que no necesitas muchos insumos como un temporizador para mandar el ciclo de candil, lo que simplifica el proceso de cultivo para los cultivadores novatos sin comprometer la calidad en el momento de la cosecha.
Las semillas de mariguana autoflorecientes, igualmente conocidas como automáticas o autos, se han convertido en poco tiempo en unas de las favoritas de los cultivadores de cannabis.
Pero sí es cierto, que la cantidad de cogollos que ofrecen las semillas de marihuana autoflorecientes puede alcanzar niveles parecidos sobre todo en cultivo interior a la que se obtiene con semillas feminizadas o regulares de la misma variedad.
Como hemos mencionado, crece vigorosa pero no alcanza mucha valor, se ramifica bastante y forma largas colas de cogollos en todas sus ramificaciones. Esta cepa contiene grandes niveles de THC, es una variedad muy preciada y lleva el nombre del fundador de Positronics.
Con las variedades fotodependientes las genéticas se mantienen mucho más estables con el paso de los abriles porque utilizamos clones élite seleccionados para producir la semilla comercial. Para la producción de las semillas feminizadas fotodependientes, el 99% de los criadores utilizamos clones élite, no poblaciones de semillas, y se utilizan siempre los mismos clones élite para producir cada variedad. Utilizar siempre los mismos parentales tiene sus ventajas, pero que de esta forma los resultados son muy predecibles, son siempre los mismos.
El entorno de cultivo foráneo se refiere al método de cultivar plantas en condiciones naturales, completamente a merced de los instrumentos. Este enfoque implica la siembra a cielo despejado, donde las plantas tienen entrada a bombilla solar natural, agua de copia, y están sujetas a las fluctuaciones de la temperatura animación.
La producción media de estas plantas click here oscila entre los 30 y 60 gramos, dependiendo evidentemente de la variedad escogida. Las autoflorecientes necesitan mucho Estrella u horas de candil para adivinar buenos cogollos y producción.
Pero carencia más allí de la verdad, porque este tipo de variedades han evolucionado enormemente desde entonces, proporcionando a los cultivadores un nuevo universo de posibilidades a considerar cuando planifican su cultivo, luego que pueden perfectamente competir en calidad con sus hermanas feminizadas o regulares.
Por el contrario, los criadores que trabajamos con genéticas autoflorecientes no podemos acatar mediante clones los mejores ejemplares que encontramos, y tenemos que trabajar con poblaciones de semillas. Esto obliga a los criadores a una permanente tarea de selección de parentales, tanto durante el expansión del widget de perfeccionamiento y crianza, como cada oportunidad que se reproducen las semillas comerciales.
De esta forma mantenemos estas poblaciones de semillas autoflorecientes en constante proceso. Esto convierte el trabajo de crianza con estas genéticas en un trabajo más apasionante y propio del criador, que continuamente tiene la opción de realizar la presión selectiva para ir llevando la población de semillas cerca de los caracteres ideales más deseados por el criador.
Las plantas de cannabis autoflorecientes son ahora un cultivo muy productivo. Con rendimientos de hasta 150 gramos (5+ onzas) por planta, son comparables en tamaño y rendimiento a las variedades de fotoperíodo. En cuanto a la potencia, las autoflorecientes se han cultivado con cepas índica y sativa que ofrecen niveles de THC y CBD iguales o incluso mejores que los de las variedades de cannabis normales.
Cada oportunidad que cruzamos una genética autofloreciente con una genética fotodependiente, en el híbrido read more resultante agrupamos el 50% de la genética de cada individuo de los parentales, o lo que es lo mismo, en cada cruce de este tipo se reduce la genética primitiva de Cannabis Ruderalis en un 50%, Semillas autoflorecientes ya que el parental autofloreciente solo cede al hijo la centro de su carga genética.
Una hipóparecer sería que este tipo de variedades desarrollaron esta característica particular de autofloración porque les supuso una delantera adaptativa que les permitía florecer y producir semillas en el corto periodo de buen clima, perpetuando Campeóní su especie en estos inhóspitos parajes.